Quinientos años de historia, una serie de procesos a lo largo de la misma que deberían haber dejado cierto nivel de evolución, toda la tecnología del siglo XXI en nuestras manos y todavía cuestiones que debieron ser superadas hace mucho son las que nos tienen estancados en el camino al progreso.

Cuando dejaremos de actuar como indios? entregando nuestros tesoros al primer extranjero que aparece con una teoría rara a cambio de cosas que en ocasiones pudieran ser catalogadas como porquerías, y en los últimos años a cambio de sueños ( Dile NO a la venta de sueños). Cuando será que vamos a aprender a esperar nuestros turno para las cosas sin “cerrucharle el palo” a los demás solo por llegar primero? y esto va desde los puestos en los trabajos hasta una simple fila en el banco.  A veces la espera es un proceso que nos prepara para manejar ciertas cosas una vez estén en nuestras manos ( y en el caso de los bancos, por respeto a los demás debemos esperar nuestro turno).

Cuando dejaremos de esperar en “va a llover” y empezaremos a trabajar por lo que queremos sin culpar a terceros de nuestras desgracias? acto que muchas veces es solo una forma de justificar a nosotros mismos nuestra incompetencia. Cuando dejaremos de “parecer” para empezar a “ser”? aunque a veces no lo podamos percibir, cada uno tiene dones que van mas allá de lo físico , estos nos hacen ser diferentes del resto dando a nuestra personalidad un toque especial.

En nuestro afán por intentar parecernos a lo que creemos es mejor perdemos el toque especial que nos distingue y pasamos a ser “uno mas de la manada”. Es hora de celebrar las diferencias, mostrar con orgullo lo que somos y quien sabe… a lo mejor de imitadores podríamos llegar a ser un modelo digno de imitar 😉