Bajo un cielo grisáseo y temperatura de 42 grados Fahrenheit, familiares, amigos y autoridades municipales y estatales de Nueva York participaron ayer del tradicional ceremonial de recordación de la caída del  avión de American Airlines que ocasionó la muerte de 265 personas, 175 de ellas dominicanas, el 12 de noviembre de 2001 en Queens.

Muchos de los familiares vestidos de negro en señal de luto llevaron flores y fotografías de sus seres queridos al monumento que fue construido  a su memoria, al conmemorarse el noveno aniversario del fatídico vuelo 587 en Rockaway. Se reunieron específicamente en la calle Beach 116 y Rockaway Boulevard, a unas 15 cuadras de donde  cayó el avión, en el área de Belle Harbor.

La ceremonia se inició con la entonación del himno de los Estados Unidos, seguido por un minuto de silencio en recordación y homenaje póstumo a las personas que fallecieron, de quienes se leyeron los nombres, a cargo de monseñor Brown, otros miembros del clero y familiares de fallecidos, seguido por el toque de campana.

Previamente, el alcalde de Nueva York, Michael R. Bloomberg, pronunció un discurso de bienvenida en el que dijo que los neoyorquinos recuerdan con dolor las muertes de los ocupantes de la aeronave y se mantienen unidos a quienes les sobreviven.

“En el transcurso de los nueve años, nuestras vidas han cambiado, y lo ha hecho la gran ciudad que nos rodea. Pero lo que se ha mantenido constante es la unidad de este grupo. En el principio que comparten solo el dolor y la tristeza, pero en la medida en que han pasado los años, la amistad ha crecido, las conexiones se han forjado, y su amor por el otro se ha fortalecido”, manifestó.

Afirmó que  esa ciudad y la República Dominicana,  sufrieron terribles pérdidas el mismo día.

Via: Hoy